Día 13: Budapest

Llego a las 8'30 de la mañana a Budapest, tras una noche en la que he descansado plácidamente, sin apenas ruidos ni nada que me molestara. Me pongo a buscar el hostel, el cual después de una hora consigo encontrar, y es que tengo un defecto (o virtud) que consiste en salir de la estación y ponerme a andar como un loco, y a veces el hostel lo encuentro enseguida y en otras ocasiones como es el caso de hoy, me las veo negras...
El hostel es patético, tampoco me podía esperar mucho de un sitio que cuesta 12 € la noche, pero lo de hoy es un caso peculiar, digamos que es un piso que entre varios colegas llevan este tema, pero es que las pintas de estos tíos es....no se como describirlos pero ni mucho menos lo que esperas de un establecimiento medio decente. Eso sí, se ven buena gente jeje, aunque todo está sucio y hecho un asco. Hasta las 2 de la tarde no puedo acceder a mi habitación, y me dicen que deje el equipaje allí, pero es que resulta que allí consiste en dejarlo en medio del salón común que tienen, donde se incluye la cocina, la sala de Internet, recepción, y sala de estar, un show nunca visto jeje, pero me inspiran confianza así que les hago caso y tiro allí la mochila (reconozco que con el paso de los días he perdido el miedo a dejar el equipaje en cualquier sitio).

Me voy a conocer la ciudad, y lo primero es buscar el Parlamento, uno de los grandes atractivos turísticos de la capital húngara. Cuando llego veo el fascinante edificio, espectacular y me informo para acceder al interior pero por lo visto y según me cuentan otros españoles, las entradas con guía castellano están agotadas para hoy. Aún así me espero e intento pillar aunque sea en otro idioma, la cuestión es entrar. Al final, no se como, pero consigo entradas con guía castellano, y yo más contento que nada, eso sí, habrá que esperar hasta las 5 de la tarde; mientras me voy a conocer el castillo de Buda.

El Parlamento de Hungría
Cruzo el grandioso "puente de las cadenas", y me surge un conflicto, subir a pie la cuesta hasta el Castillo o coger el funicular típico y caro, y opto por andar. A la mitad del camino me dirijo a una chica para que me haga una foto y cual es mi sorpresa que me habla en español, pero lo mejor es que sabe que soy español porque me ha visto una banderita de España que tengo en los calcetines jeje, increíble. Llego arriba y las vistas son maravillosas. Todo ese entorno es muy bello, declino entrar en las iglesias, prefiero deleitarme con las vistas.

Vista a mitad de camino hacia Buda
En lo alto de la colina "Buda"

Iglesia en Buda

Vista del Parlamento desde Buda
Tras conocer toda esa zona, llega la hora de comer, y recuerdo que el primer día en Bruselas, una pareja húngara que conocí en el hostel, me recomendó comer en el Mercado, así que les hago caso. Tras un largo paseo bajo un sofocante sol, llego al Mercado de Budapest, con una arquitectura preciosa y lo más importante, su contenido, planta baja para puestos de alimentación y planta superior para bares y tiendas de souvenirs. Doy un repaso a la comida que que se ofrece y al final elijo un pollo relleno que al parecer es típico de allí, y lo cierto es que está riquísimo, además a un precio asequible, recuerdo que aquí hay florines y no euros, y esta mañana ya hice el cambio tras repasar los lugares más recomendables.
Exterior del Mercado

Interior del Mercado
Tras almorzar, recorro la calle más comercial de la ciudad, repleta de tiendas y restaurantes, y decido ir al hostel para conocer mi habitación. Lamentable jeje, pero no esperaba más, está llena de botellas de cervezas, con ropa y maletas por medio de otra gente. De paso conozco a unos franceses que también están allí, y ahora van a uno de los famosos balnearios de la ciudad, yo iré mañana.
Ahora me dirijo al Parlamento donde tengo entrada para las 5. Hay muchos españoles, y es altamente recomendable el interior y la historia de este país que no hace tanto, fue uno de los más importantes del mundo.
Interior del Parlamento
Estoy cansado, llevo todo el día sin parar, además hace mucha calor y para colmo el paso de los días se han cebado con mis pies, que están destrozados y me duelen muchísimo, hasta se me ha pasado por la cabeza acudir al medico. Por eso, no quiero volver muy tarde al hostel, así que voy al puente de las cadenas a hacer unas fotos y luego cojo la calle comercial que me lleva hasta el hostel. Por el camino, para comer opto por una comida que hasta hoy nunca había probado, los famosos kebabs, y me ha encantado, está riquísimo. Llego al hostel sobre las 9 de la noche, me ducho, y me conecto un rato a Internet en la sala "multiusos", de paso conozco a los demás compañeros, los de las botellas de cerveza jaja, son de Manchester y hablamos de fútbol como no...Hoy ha sido un día fantástico!!!
Puente de las cadenas




Día 12: Cracovia y tren a Budapest

Despierto a las 7 de la mañana, me ducho, hago un buen desayuno y me preparo 2 bocatas para el almuerzo en el buffet. Me marcho al lugar desde donde salen las excursiones a Auschwitz, aquello está lleno de ingleses, sólo 6 españoles entre todos los componente del bus. Tras un hora de camino llegamos a este lugar tan cargado de historia, en este caso desagradable y macabra, pero creo que es una visita importante para que seamos conscientes de las barbaridades que los humanos podemos llegar a hacer y para que no vuelva a ocurrir nunca más. El guía es polaco pero habla un perfecto castellano. A continuación muestro algunas fotos de este campo de concentración, sin duda el más importante y donde más personas cayeron. Espeluznante es la sala donde se agrupan restos de maletas, gafas, pelo...Nos cuenta el guía que les vendían a todos los que llegaban, judíos especialmente, que iban a trasladarlos a un lugar para trabajar, y que se llevaran sus pertenencias que les haría falta, pero en realidad solo pretendían acumular material para que los nazis pudieran fabricar otras cosas, por ejemplo con el pelo que les cortaban fabricaban cuerdas. A continuación muestro algunas fotos.

Entrada al campo de concentración

Calle dentro del campo de concentración

Gafas

Zonas electrificadas

Maletas

Zapatos
Después de una hora, y con el cuerpo un poco descompuesto tras escuchar la dura historia que contiene este lugar, nos trasladan a otro lugar que se encuentra a 5 minutos, Birkenau, que formaba también parte de este complejo, eso sí, en este caso es una reconstrucción del original.

Las camas

Vista desde la torre de control

Entrada a Birkenau
A la 1 de la tarde terminamos esta visita, y sobre las 2 estamos de nuevo en Cracovia. Ha sido un visita dura pero altamente recomendable por la historia que supone ese lugar.
Almuerzo los 2 bocatas que me preparé esta mañana, y tengo prácticamente visto todo lo importante de Cracovia. Hago una visita al barrio judio, luego vuelvo al centro, y por último al hostel donde me conecto un rato a internet, como en un Mc Donalds de la plaza del Mercado, y ya justo antes de irme a la estación, me encuentro un coro de personas que están viendo a un personaje que se mantiene en el aire solo con el apoyo de un bastón que sujeta con una mano, increible pero cierto.
Personaje!!!
Y así acaba mi estancia en Cracovia, una ciudad que me ha convencido, aún un poco por desarrollar en algunos aspectos pero que están muy bien, con muchas ganas de ser parte de la nueva Europa, igual vuelvo en junio de 2012 para ver a la selección española en la Eurocopa jeje.
A las 9'57 cojo el tren destino a Budapest, y por sorpresa, el mejor tren de todos los que he montado hasta ahora, muy moderno, muy limpio y con unas camas más que aceptables, y además me tocan de compañeras una danesa que también viaja sola, una australiana, ya de cierta edad y otra que no recuerdo, pero todos con ganas de descansar, lo cual se agradece en un tren nocturno.

Día 11: Cracovia

He dormido poco en el tren, que hacía muchísimo ruido, pero bueno no ha estado mal la experiencia, mucho mejor que ir todo el tiempo sentado. He llegado a las 7'30 a Cracovia, y a las 8 ya estaba en el hostel, que está muy cerquita, aunque al princpio me ha costado encontrarlo. El recepcionista ha estado muy simpático, aunque todo sea dicho, no me he enterado de nada...Eso si, me ha dejado desayunar gratis. Como tan temprano no podía entrar en la habitación, me he ido a un centro comerial cercano y he comprado algunas cosillas que se me habían acabado (champú, maquinillas, algo de fruta...). Como tengo tiempo de sobra, me voy al centro, que también está muy cerca, y la verdad, me sorprende gratamente. He tenido que cambiar dinero en una oficina de cambio, después de buscar la que más dinero me daba (me estoy especializando en oficinas de cambio, quien me lo hubiera dicho jejeje). Al rato vuelvo al hostel donde me afeito y me ducho, que ya era hora desde ayer por la mañana. Dejo la mochila en recepción y empiezo a hacer turismo.
Mi primera visita ha sido a la catedral, aunque desde lejos parece una fortaleza, su entorno es muy bonito, y el interior no está mal, supongo que tiene grandes obras de arte, además de varios personajes polacos importantes enterrados allí, aunque yo tampoco soy capaz de valorar mucho todo eso. Si me ha sorprendido una estatua en las afueras de Juan Pablo II.

Exterior de parte de la Catedral

Patio

Estatua de Juan Pablo II
En torno a la 1 de la tarde me he vuelto al centro, donde busco algún sitio para comer. El centro de la ciudad tiene como base principal la espectacular plaza del Mercado, es inmensa, y muy bella, me ha encantado. En el centro un edificio que es un mercado, hoy en día repleto de tiendas de souvenirs. He comido en un restaurante italiano, espaguetis, bastante barato.

Plaza del Mercado
Vuelvo al hostel para meter la mochila en la habitación, y rápidamente me voy a otro punto cercano, donde tengo que coger un autobús en una excursión a las Minas de Sal, aproximadamente a 45 minutos de Cracovia. En el bus la mitad somos españoles, el resto guiris. Hago amistad con 2 chavales de Almería que están haciendo un interrail exclusivamente por Polonia. Juntos visitamos las Minas de la Sal, que consiste en introducirse en unas minas, que cuando dejaron de rendir económicamente, decidieron hacer monumentos  de sal, desde caballos, a cualquier tipo de personaje, pero sin duda lo más espectacular es una capilla impresionante realizada de sal. Para comprobar que no es de otro material, la guia nos ofrecer probar dicha sal. Ha estado bien la visita, es uno de los principales reclamos turísticos de la ciudad, aunque todo sea dicho, me ha decepcionado un poco, esperaba algo más.

Figuras de sal

Capilla
Volvemos a Cracovia y estoy reventado, anoche dormí muy poco y necesito descansar. Me hago un bocata para comer y vuelvo a dar un paseo por la plaza del Mercado que está muy ambientada de noche.  Vuelvo pronto porque mañana tengo que madrugar, a las 8 hago una excursión al campo de concentración de Auswitch-Birkenau.




Día 10: Praga y tren a Cracovia

He despertado sobre las 9 de la mañana, me he duchado en el diminuto cuarto de baño que nos ofrecen para todos los huéspedes del hostel, y no he desayunado, no me apetecía nada de lo puesto en la mesa. El objetivo del día es visitar la mayor parte de cosas que visité ayer con el free tour, pero con más tranquilidad y disfrutando del paisaje y del momento, y es que el único incoveniente de estos tours "gratuitos" es que vas "volando" a todas partes...Visito la torre del reloj astronómico, y a pesar de que prometí no subir a más campanarios en este viaje, no he podido resistir la tentación de disfrutar desde las alturas ésta ciudad. Por cierto, el vendedor de tickets era catalán.



Fotos 1 y 2, vistas desde la torre del reloj - Foto 3, reloj atronómico
Luego subo hasta el castillo, haciendo el recorrido inverso al de ayer, decido solo visitarlo por fuera, ya que está todo llenísimo de gente y realmente lo que me apetece es pasear. 

Foto 1, cambio de guardia en el Castillo y foto 2, vistas de la ciudad, desde el Castillo
De esta forma acabo llegando al Puente de Carlos, en el que vuelvo a alucinar con la cantidad de gente, artistas, personajes de todo tipo con los que te cruzas por aquí, y siguiendo la ribera del rio Moldava llego hasta una construcción muy particular que rompe con las antiguas construcciones de la ciudad, pero que sin duda alguna es una pasada, le hablo de la popularmente conocida como "Dancing House" del famoso arquitecto Frank Gehry.

Dancing House
Como un trozo de pizza para no perder tiempo, y me desplazo hasta el cementerio judío y varias sinagogas que se pueden visitar con el ticket. La verdad es que me ha impactado mucho toda esta zona, la atracción de público que tiene, y en general conocer esta religión que admito hasta hoy conocía muy poco. Además, es impresionante lo del cementerio, porque cuentan que puede haber 7 y 8 plantas una encima de otra, de muertos.

Cementerio Judío
Vuelvo al hostel para recoger la ropa tendida que lavé esta mañana, de la que ha sido mi primera lavadora, me conecto un rato a internet y me voy a coger al tren destino a Cracovia. Antes tengo que comer algo, pero tengo un problema, no me quedan coronas checas, y no admiten euros en las cafeterías de la estación, así que no me queda otra que cambiar 5 euros por coronas. Me compro un bocadillo y un refresco, que la noche es larga. 
Ahora, mientras escribo, estoy en la cama del tren, en una habitación con un polaco, un sueco y un japonés, con el que hablo bastante, que gente mas apañada son estos asiáticos. Los demás también van a Cracovia. Es mi primera noche durmiendo en la cama de un tren, supongo que será mucho mejor que ir sentado...Por cierto, destacar que cada día me va mejor y me encuentro con más ganas, estoy disfrutando del viaje!!!